Nombre: Minotauro
Dieta: Carnívora
Peso: 2 toneladas
Altura: 2-3 metros
Esperanza de vida: 200 años
Época: Mítica
Avistamientos hoy: No
Los minotauros son seres con cuerpo de hombre y cabeza y cola de toro. Conocidos por su fuerza y musculatura, su origen se atribuye a una maldición. Son menos inteligentes que los humanos aunque muy astutos y tienen más desarrollados el olfato y la infravisión.
Características del Minotauro
Son todos machos y sienten especial predilección por las mujeres. Pueden vivir alrededor de los 200 años y se alimentan preferentemente de carne humana. Son muy predecibles en los combates: mientras muerden a los seres inferiores, los de mayor tamaño son embestidos con su poderosa cabeza. A veces luchan con un hacha grande.
Cuando los minotauros resultan heridos en combate entran en un estado de ira. Se aturden y les resulta más difícil esquivar los golpes, pero atacan y golpean sin descanso. Su furia los vuelve inmunes al dolor. Algunos minotauros prefieren habitar en laberintos subterráneos. Gracias a su magnífico sentido de la orientación, pueden perseguir y encontrar rápidamente a cualquiera que invada sus dominios.
Los Minotauros forman parte de juegos de rol y aparecen en universos dentro de la literatura de ficción, debido a la popularidad del mito del minotauro.
El minotauro del laberinto de Cnosos en Creta
El rey Minos pidió ayuda al dios Poseidón (su tío) para ser aclamado como rey. Este le ofrendó un toro blanco para que lo sacrificara en su nombre. Pero Minos le dio pena matar un animal tan hermoso, así que sacrificó a otro toro.
Poseidón se vengó de Minos haciendo que su esposa Pasifae se enamorara del toro blanco que este había escondido. De esta unión nació Asterión, el primer minotauro del que se tenga noticias. Pero el dios Poseidón continuó su venganza convirtiendo al minotauro en carnívoro y salvaje.
Para proteger la ciudad, Dédalo construyó el laberinto de Creta y encerró al Minotauro. Una vez al año los atenienses entregaban en sacrificio siete jóvenes y siete doncellas para que se alimentara, por una afrenta que hicieron a Minos.
Teseo y el minotauro
Teseo, hijo de Egeo, se dispuso a matar al Minotauro y liberar a su patria de Minos y su condena. Se ofreció ser parte de la ofrenda para poder enfrentar al monstruo.
Al llegar a Creta Teseo conoció a la hija del rey llamada Ariadna. Enamorada de Teseo y con ayuda de Dédalo, Ariadna ideó un plan para ayudarlo. Entregó a Teseo una espada para defenderse y un ovillo de hilo para salir del laberinto. Teseo entró en el laberinto y ató el hilo a la entrada. Cuando mató al minotauro, enrolló el ovillo y salió.
Teseo olvidó las promesas y abandonó a Ariadna, regresando a Atenas. Ariadna lo maldijo: el rey Egeo, padre de Teseo, le había dado unas velas blancas para que las izase si vencía y unas negras si regresaba muerto. El desmemoriado héroe olvidó izar las velas blancas.
El rey, al ver los barcos en luto creyó que su hijo había muerto. Se lanzó por un barranco al mar, y se cumplió la maldición de Ariadna. Las aguas donde cayó se nombraron Mar Egeo en su nombre.