zombi

Nombre: Zombi
Dieta: Carne orgánica
Peso: humano deteriorado
Punto débil: destruirle la cabeza
Punto fuerte: Mordisco
Naturaleza: Aparentemente sin personalidad
completamente instintivo e irracional
Violento y mortal.
Época: Histórica

Avistamientos hoy: Sí

Los zombis no pasan de moda. Desde las franquicias de Resident Evil hasta Left for Dead o, más recientemente, The walking dead, la posibilidad y horror de enfrentarte cara a cara con un muerto revivido ha estimulado nuestra imaginación desde el siglo pasado y continúa hasta nuestros días.

Pero, ¿qué sabes en realidad sobre los zombis? Si quieres conocer que hay de verdad tras la leyenda y el comercialismo, aquí lo encontrarás.

Que es un zombi: características

En la connotación a la que nos referimos en este artículo, zombi (en inglés zombie) es un cadáver resucitado mediante un ritual mágico, que sigue las órdenes del hechicero que lo resucitó.

Está relacionado a la creencia vudú, originaria de las etnias Ewe, Kabye, Mina y Fon de Togo y Benín pero sincretizada y popularizada en Haití. Así, los bokor o sacerdotes de magia negra son esas figuras tenebrosas que alzan zombis y los ponen a trabajar como sus esclavos.

como identificar a un zombi

Así, un zombi es un ser sin inteligencia, que solo obedece órdenes o actúa por simple impulso. En contraste, están dotados de gran fuerza física y una determinación empecinada. Al estar muertos, no tienen emociones ni dolor.

Otro de los rasgos más llamativos de estos seres es su carácter caníbal, en especial por los cerebros de las personas vivas. Se cree que cuando un zombi muerde a una persona, esta se contagia volviéndose también zombi. En referencia al aspecto, se les presenta con la piel muy pálida, verdosa incluso, en diversos estados de putrefacción según sea lo reciente de su muerte.

Origen en la cultura y la mitología

Que un muerto regrese de la tumba no es un suceso desconocido para la mitología, como lo evidencias las momias o los necrófagos. Así, los muertos menores que no están animados por un espíritu fuerte y por tanto carecen de inteligencia pudieran ser considerados zombis.

Pero la primera referencia directa al término data de 1789, cuando Moreau de Saint-Méry la describió en un diccionario de la isla Santo Domingo como palabra criolla que designa a un espíritu que regresa de la tumba.

La mitología del zombi dentro de la cultura haitiana hubiese quedado como muchas otras de las historias de espíritus si no hubiese sido por la intervención de William Buehler Seabrook, quien publicó una novela llamada The magic island. Esta dio pie a una obra estrenada en Broadway, en 1932, llamada Zombie.

Ese mismo año los hermanos Halperin filmaron basada en esa obra La legión de los hombres sin alma, considerada la primera película de zombis, con la actuación de la mítica figura de Béla Lugosi como el hechicero vudú Legendre.

Desde ese entonces, el zombi es un clásico protagonista de las películas de horror de serie B (de bajo presupuesto). Tuvieron su gran éxito en la pantalla grande con “La noche de los muertos vivientes” de 1968, con un gran relanzamiento gracias a la serie “The Walking Dead”.

Esta película definió un punto de viraje en la leyenda del zombi, con 5 premisas fundamentales que lo separan de la historia vudú y se repiten hasta nuestros días:

  • Los zombis no son un problema puntual, sino una plaga de proporciones bíblicas.
  • Los zombis no son controlados por un hechicero.
  • Su única motivación es alimentarse de los vivos.
  • Los zombis no racionan ni usan instrumentos.
  • El peligro real es su número y su voracidad.
  • El motivo de esta resurrección masiva de los muertos no es importante.

Estos nuevos zombis pueden ser particularmente lentos, tener una velocidad comparable a la de un ser humano o incluso ser mucho más rápidos. La película The Cell, basada en la novela homónima de Stephen King, Soy leyenda o el ejército de los caminantes blancos en la serie Juego de Tronos son ejemplo de ello.

Cómo distinguir a un zombi

Pues por su característica fundamental, que no es precisamente el ser un muerto viviente: es su falta de inteligencia y voluntad lo que los distingue.

De hecho, se ha hecho común la expresión “estás como zombi”, cuando la persona actúa de forma automática, sin pensar o cuestionar nada.

Cómo matar a un zombi

Desde un punto de vista científico, se ha alegado que el estado zombi no es real. La explicación que se propone es que el hechicero administraba a la víctima un poderoso veneno que induce un estado catatónico. El componente principal de estos “polvos zombis” es la tetradotoxina, extraída del pez globo y otros sapos venenosos.

El afectado cae entonces en un trance, en el que es consciente de lo que sucede a su alrededor… pero no puede moverse. Así, su familia lo da por muerto y lo entierra en un ataúd. Luego, el brujo lo recobra de la tumba y le administra un brebaje que contrarresta los efectos de la poción.

Las personas quedan mentalmente afectadas tras esta experiencia, no solo por el efecto del veneno y la traumática experiencia de ser enterrado vivo, sino además por la privación de oxígeno al cerebro tras ser encerrado en un espacio cerrado como lo es un ataúd.

Así que no se puede matar un zombi. No obstante, por si las dudas o el apocalipsis, siempre puedes despachurrarle la cabeza con un hacha, una bala o quemarlo.  Si estás en Westeros, seguir la sugerencia de Sam Tarly a Jon Snow y usar un puñal de vidriagón –también conocido como obsidiana.

Si están entrando en tu jardín, empieza a plantar girasoles.

Escenas de película de zombis famosas

En la cultura popular, la aparición de los zombis ha sido bastante frecuente. Basta recordar el exitoso video musical de la canción Thriller de Michael Jackson, sus apariciones en South Park o los Simpsons, el anime Highschool of the Dead o la lucha WWE, con personajes como The Undertaker o Kane.

Si hablamos de la versión haitiana controlada por un hechicero malvado, además de White Zombi (La legión de los hombres sin alma) podemos destacar The Walking Dead (1936, protagonizada por Boris Karloff) o The plague of the Zombies (1966).

Ya bajo el concepto del zombi como plaga sin control, además de La noche de los muertos vivientes (a la que se le hizo un remake en 1990), destacan Dawn of the dead (1978) y Braindead (1992) de Peter Jackson.

Más tarde en el 2002 vendría un nuevo renacer de la temática de los zombis con la saga de Resident Evil, a la que siguieron Planet Terror (2007), Soy leyenda (2007) o Guerra mundial Z (2013).

Y luego, en los últimos años, asistimos a revisiones del género por parte de directores de culto. Por ejemplo la última novedad de Jim Jarmush: los muertos no mueren.

Como colofón, os dejamos con una selección de las 10 mejores películas de zombis (comerciales):